En su noticiero del pasado miércoles, en Fórmula, el comunicador líder de México, Ciro Gómez Leyva protagonizó un cierre de año turbulento, volviéndose a trenzar con el adicto al enojo Epigemio Ibarra.
Ciro Gómez Leyva respondió engallado al presidencial y gratuito consejo del té de tila que le envió la presidenta Claudia Sheinbaum, para que supere el coraje que hizo pasar con sus desplantes y muy conocido cinismo el arrastrado “biógrafo” de López Obnrador.
Ibarra lo hacía en sus mejores tiempos como los buenos ejemplares del periodismo que se daban hasta con la cubeta en cuando sus controversias se daban madrazo tras madraz o cuando sus controversias en los espacios comunicativos era rebasadas por le enjundia y a ¡darse con todo!.

 
								 
				 
								 
															



