CIUDAD DE MÉXICO.- Estimadas senadoras y estimados senadores:
Mientras revisaba y leía todos sus mensajes, me han buscado distintos medios de comunicación por la convocatoria que un grupo de legisladoras y legisladores publicó para reunirse el viernes, antes de la plenaria.
Debo fijar mi posición, con toda claridad y seriedad.
PRIMERO. No tengo inconveniente, y creo que nadie lo tiene, para que nos reunamos y deliberemos asuntos generales, entre ellos, el relativo a la comisión sobre el tema Veracruz y que, como siempre, se tomen las decisiones por mayoría, dado que es el Pleno el que formalmente resuelve la constitución de comisiones. Lo que existe es un grupo de la Jucopo, como comisión deberá ser, en su caso, aprobada por el Pleno, una vez que inicie el periodo de sesiones ordinarias.
SEGUNDO. No dejo de señalar, y lo haría por cualquiera de ustedes, la infamia que se perpetró en contra de José Manuel del Río, secretario técnico de la Jucopo, y de otras personas inocentes que padecen persecución en Veracruz. Quienes tengan interés, pueden ver el expediente de nuestro compañero y encontrarán que la acusación no tiene ninguna base. Seguramente la justicia federal lo protegerá, además de que el delito de ultrajes a la autoridad se ha derogado, para beneficio de la ciudadanía de ese estado.
Considero que él y quienes están en su misma posición merecen nuestra mínima solidaridad, porque, si permitimos este tipo de excesos, a cualquiera le podrá ocurrir lo mismo; además, es nuestra esencia como movimiento y, como fundador del mismo, sé que es nuestro propósito defender a las personas más vulnerables.
TERCERO. Entendí, de acuerdo con quienes escribieron, que había dos propuestas, una de la compañera Gloria y otra de la compañera Margarita. La primera, que la reunión de asuntos generales se realizara antes de las 10:00 de la mañana y de la llegada del secretario de Gobernación; la otra, que se llevara a cabo en la tarde, cuando termináramos la reunión del sábado.
En uno u otro momento este tema se puede discutir, pero es lamentable que estos asuntos se diriman en los medios de comunicación y que se observe este clima del cual, en lo personal, no estaba enterado y que, al mismo tiempo, no percibo entre ninguna senadora ni en ningún senador, a quienes lo único que hemos hecho es darles un trato digno e igualitario. Nadie puede señalar un maltrato o una falta de atención de mi parte y tampoco daré motivo para ello, ni ahora ni nunca.
CUARTO. También deseo deliberar sobre el asunto de Veracruz, sobre la agenda legislativa y los acuerdos del Grupo, como siempre lo hacemos en las plenarias con quienes asisten regularmente a ellas antes del periodo ordinario. Tenemos que discutir sobre el trabajo de comisiones, así como respecto a las ausencias cada vez más frecuentes y que ponen en el riesgo el quórum y las votaciones, lo cual nos obliga a pedirles a compañeras y compañeros de la oposición que nos respalden.
Son temas que debemos abordar y para lo cual siempre he mostrado disposición. Tenemos todo el sábado, domingo o lunes; no veo razones para polarizar posiciones ni tampoco para debatir estos temas en los medios de comunicación, cuando son decisiones internas que deben unificarnos, no dividirnos.
Se aproxima un periodo difícil; no basta nuestra mayoría simple, requerimos mayorías calificadas y debemos actuar con respeto internamente y también con los otros grupos. Así lo creo y en congruencia con ello me he conducido.
Por cierto, todas y todos somos leales al presidente de la República, al Lic. Andrés Manuel López Obrador, y hemos actuado de conformidad con ello en las propuestas legislativas que nos ha encomendado.
Todas las reformas -constitucionales y legales-, así como acuerdos internacionales y nombramientos se han aprobado. No hay ninguna ley ni un solo nombramiento ni instrumento internacional que se haya detenido o esté pendiente entre aquellos que interesan a la República, por eso no puedo aceptar que pongan en duda la lealtad de todo el grupo para con el presidente de México.
Éstos son momentos complejos, compañeras y compañeros, difíciles, que nos imponen perseverancia, unidad, humildad y serenidad.
Deseo que todo se resuelva respetándonos y dialogando, y que la mayoría decida.